miércoles, 25 de junio de 2008

Libegalia

Hoy tengo poco que hacer y en casa ha entrado una mosca. Voy a sacar el rabo.

"El día que estos ignorantes aprendan algo de Historia, o tengan al menos la decencia de callarse, perderemos un motivo más para reír (o para llorar) cada día". La frase es de Irene Sánchez en el blog Chiaroscuro. La joya en cuestión es un caso de la (joven) ola de libegalismo socialdemócrata que asuela Eppanyia.

Los conservadores son gentes que se aferran ideológicamente a (aparentemente) sólidos constructos heredados, cuya única explicación es la existencia de dioses, totems u otras entidades inasequibles a la observación. Para resaltar su importancia se dota a los nombres que tales constructos designan de una primera letra escrita en mayúscula. En el caso que me ocupa: Historia.

La Historia es el tótem al que Doña Irene se adscribe para fustigar a esa horda de ignorantes que pretenden reescribir la historia de Eppanyia en nombre de la llamada memoria histórica. El asunto de la memoria histórica tiene que ver con la percepción que algunos españoles tuvieron (tienen, tenemos) del sistema franquista, muy en especial de las actividades de exterminio ideológico por el tal sistema perpetradas. Con exterminio ideológico me refiero a la eliminación física de personas por estar adscritas a una determinada opción política, una actividad de la que todavía hay acciones residuales en las de la (llamada) Benemérita en el País Vasco (tortura o malos tratos de detenidos por pretender la independencia del País Vasco). Entiendo por memoria histórica, en esta situación que me atañe, la recuperación de la dignidad en el recuerdo colectivo de quienes sufrieron el exterminio y/o el oprobio a (ideológicas) manos del franquismo y de quienes lo siguen sufriendo en el posfranquismo.


Pintada con el anagrama de la organización terrorista E.T.A. en Alsasua

La palabra libegal tiene, en mi caso, una doble procedencia etimológica. Por un lado, la pronunciación del fonema r por parte de ese payaso mediático llamado Federico Jiménez Losantos. Por otro, la palabra GAL (sigla de Grupo Antiterrorista de Liberación). Parece ser que el llamado GAL fue un grupo de acción parapolicial contra el terrorismo independentista vasco que fue financiado (no sé si parcial o completamente) mediante fondos reservados del estado. (me es) Imposible decir si fue creado por el gobierno del PSOE (1982-1996), fue en cualquier caso utilizado y financiado por ese gobierno. El descubrimiento y puesta a la luz de ese grupo de acción terrorista de estado es de gran relevancia en el desarrollo de la historia reciente de España. Significa, por un lado, el embadurnamiento de falsedad y corrupción de la imagen del PSOE, partido que había llegado a y ejercido el poder con un permanente martilleo ideológico de descalificación democrática de la llamada derecha (por entonces UCD y AP, luego PP), a la que, explícita o implícitamente acusaba permanentemente de estar vinculada con la dictadura y carecer de ética democrática. El uso del caso GAL comporta, por un lado, el encumbramiento mediático del diario El mundo y su director Pedro J. Ramírez y, por otro, la recalificación del PP ante la opinión pública como partido democrático y su victoria en las elecciones de 1996 enarbolando la bandera del liberalismo.

Cabecera de portada del diario nacionalista español El mundo

El libegalismo es la tendencia ideológica que combate la legitimidad de la memoria histórica. Su palanca ideológica es la constitución de 1978, elaborada por consenso entre las fuerzas políticas entonces legalizadas con la implícita declaración de no remover el pasado (no utilizarlo como arma arrojadiza para desacreditar a alguien por su adscripción política y su vinculación con el pasado anterior a 1978). Es, en realidad, un movimiento muy amplio, con no poca infiltración en el PSOE, de corte esencialmente nacionalista español.

Hay usos, aparentemente inocentes/inocuos, que se solapan y se refuerzan en la consolidación de las actitudes. Estoy pensando en el uso del usted y todos esos ritos de cortesía/pleitesía que, como un juego, se extienden en las relaciones sociales de este país cada vez más (nuevo) rico, más aristocrático. Tal vez, a alguno, después de reflexionar acerca del origen etimológico de la palabra cortesía se le quitarían las ganas de andar tratando de usted al personal. Lo más probable es que a ninguno, porque, en realidad, el personal es mucho más conservador de lo que quiere admitir y, con las consecutivas remesas de extranjeros, la cosa sigue dando para lucir palmito cortesano.

4 comentarios:

NáN dijo...

Ay, Zalakaín, el libegalismo de Losantros va mucho más allá de la otra vertiente que pones (y que a mí me hizo abandonar por un tiempo, hasta el acojono del ansarismo, mi apoyo a ese partido).

Y va mucho más allá porque los payasoadictos cada vez tienen más ganas de partirnos la cara y decirnos que lo hacen porque no tenemos memoria de nuestra Historia. (Ellos la tienen de elefante, además de tener cartografiadas a sus compañas hasta en los muros de las iglesias).

En lo del Usted, mira tú, disiento. No hay peor tratamiento que un falso "tú". Compañeros somos los que somos; mi jefe, que me hable de usted.

zalakain dijo...

De discrepar eres libre, querido. Con sólo tutearnos, es obvio, no vamos a cambiar el mundo, pero con tu comentario, disculpa, entiendo que confirmas lo que he dicho. El usted es una marca de delimitación del ámbito personal, un y-de-aquí-no-pasa-usted.

Ganas de partirnos la cara puede que las tengan, pero, afortunadamente, el tiempo de esas cosas ya pasó.

Por cierto, lo de "Losantros" ¿ha sido intencionado o un afortunado desliz tipográfico?

NáN dijo...

Yo le llamo así. Hubiera sido mucho mejor el "desliz", pero no.

Una vez cometí uno verdaderamente genial. Estaba en una empresa editando los textos de CD-ROM culturales, de esos que iban a ser la bomba y desaparecieron por las copias. Como tenía tiempo libre dije que me dejaran traducir el paquete, con los requisitos del sistema y todo eso. Un reto.

Pues bien, era un producto sobre instrumentos musicales y en la caja, en lugar de "Marca registrada de XXX" puse "Maraca registrada de ...". ¿No es espléndido?

zalakain dijo...

Jajaja :)) ritmo en las venas