viernes, 25 de enero de 2008

(a ciegas)

Cuando aún el mundo no era uno historias de amor cantaban en las barras de la noche, soñaba ser tu amante disuelta tú en nubes de humo e inauditas melodías, creía habitar tu mente libando música de alcohol.

1 comentario:

Camilo dijo...

Por supuesto, una maravilla. Una voz tranquila. Paz para el espíritu. Un saludo desde Madrid.