miércoles, 5 de diciembre de 2007

Jim Humble


Parece que es ingeniero aeronáutico y que entonces se dedicaba a buscar oro. Durante una expedición a la selva de Guyana, en 1996 vio enfermar de malaria a algunos compañeros de equipo. A falta de otra solución, se le ocurrió administrarles una sustancia utilizada para desinfectar agua, conocida como oxígeno estabilizado, con el resultado de una curación casi inmediata.

Cuando comprobó que el remedio era repetidamente eficaz, se lanzó a una campaña en Africa, donde ha conseguido la curación de miles de enfermos.

El producto es una solución al 28% de clorito sódico en agua. Mezclado con vinagre, o con ácido cítrico, se consigue una liberación del ión clorito (ClO2), que parece ser el agente microbicida que acaba con toda clase de gérmenes patógenos. Los fabricantes de antibióticos deben de andar desesperados.


Su página web.

1 comentario:

Maripuchi dijo...

Esto sí que es un notición. Un beso.